Río de Janeiro, 8 de agosto, 2016 (Reuters). La policía civil de Río de Janeiro realizó una operación para desmantelar una banda internacional que comercializaba entradas de forma ilegal en los Juegos Olímpicos, la que dejó como saldo la incautación de más de mil boletos y la detención de dos sospechosos.
Un escuadrón especial de la policía civil para grandes eventos detuvo el viernes a Kevin James Mallon, uno de los directores de la compañía inglesa THG y a Bárbara Carnieri, funcionaria de la empresa que fue contratada hace tres meses para trabajar como intérprete.
El ex director ejecutivo de THG James Sinton fue detenido por el esquema de venta ilegal de entradas durante la última Copa del Mundo de fútbol disputada en 2014 en Brasil, la que vendía boletos a precios más altos.
"En el momento de la detención, Kevin tenía entradas falsas y fue llevado a la comisaría de policía. Él fue procesado por los delitos de asociación criminal, marketing de emboscada y facilitación de reventa", dijo la policía en un comunicado.
Carnieri enfrenta cargos por marketing de emboscada.
Según el Comité de Río 2016, la demanda por boletos para los Juegos está en sólo un 82 por ciento, una tasa inferior a la de Londres 2012, a pesar de que están siendo comercializados casi a la mitad de precio.