TOKIO (AP) — Una cancelación de los Juegos Olímpicos de Tokio --lo mismo que una postergación o la realización de justas sin público-- tendría un impacto tan global como la misma propagación del coronavirus que hace peligrar la competencia.
El Comité Olímpico Internacional y los organizadores locales dicen que los juegos se llevarán a cabo como estaba programado, pero el reloj sigue avanzando.
El destino de los juegos afecta a 11.000 deportistas, además de 4.400 paraolímpicos, técnicos y dirigentes, organizadores, el gobierno japonés y el orgullo nacional, medios de transmisión, aficionados y patrocinadores de todo el mundo. Súmele a esto hoteles, aerolíneas y choferes de taxi, así como 80.000 voluntarios que no cobran y que se perderían una oportunidad única en la vida.