La americana Simone Biles recibió una mezcla de aplausos y abucheos antes de entrar en la escena este lunes, día de decisivas medallas en las finales por aparatos en gimnástica artística. Aplausos por ser la estrella de gimnástica en los Juegos Rio 2016. Abucheos por concurrir con la brasileña Flávia Saraiva.
Cuando se presentó en la barra de equilibrio, Biles casi cayó en un mortal para frente, dando un buen susto al público. Al final, reinaban los aplausos, pero los 14,733 puntos no fueron suficientes para la medalla de oro.
Sanne Wevers, de Países Bajos, fue la ganadora, y Lauren Hernández de Estados Unidos, ganó la plata. Biles acabó con la medalla de bronce, mientras Flavinha salió consagrada y aplaudida por su quinto lugar.
La competencia empezó con la china Fan Yilin, que logró 14,500 puntos. La canadiense Isabela Onyshko lo hizo más fácil para las rivales, con una caída en el mortal hacia atrás con pirueta.
Acabó con 13,400. Biles, con 14,733 estaba bastante ansiosa debido a la buena prueba de Sanne Wevers, que terminó con 15,466. Pero la estadounidense se aseguró un lugar en el podio tras la actuación de la rumana Catalina Poner, que sólo obtuvo 14,000 puntos.
Laura Hernández mejoró en el escenario para los Estados Unidos: 15,333, en segundo lugar. Y la estrella local, la brasileña Flavinha, tuvo un pequeño desequilibrio y perdió la oportunidad de medalla. Sin embargo, se garantizó un buen quinto lugar.
Biles quería hacer historia, convirtiéndose en la primera mujer en la historia de la gimnasia artística que se llevara de unos Juegos Olímpicos cinco oros. Tras conseguir el oro por equipos con EEUU y el de la competición individual y en salto, en la barra ha tenido que conformarse con el bronce, pero volverá a intentar el oro en el suelo, su aparato más destacado.
